Sin palabras

Otro tirano menos

aunque lo peor ya está hecho.

Yes, we can't

Ya falta muy poco para la elección del nuevo presidente de los E.E.U.U.

¿Ganará Obama? Es lo que desea mucha gente en todas partes, aunque en una proporción menor en los USA que en el resto del mundo. Mi opinión es que el resultado es más incierto de lo que indican las encuestas, porque

A) La cuestión racista. Los EEUU han sido históricamente un país racista, en particular con respecto a los negros. Si están en el país es porque en su día fueron llevados allí como esclavos. Este aspecto no se revela en las encuestas ni en las declaraciones, ya que actualmente manifestarse públicamente como racista no se considera correcto. Pero USA es muy grande, y hay una masa enorme de personas que viven en lo que se llama América profunda, y cuyo voto cuenta. Y su criterio no se corresponde con el que nos llega desde las costas civilizadas del Este o del Oeste.

Existe un detalle relativo a las encuestas con respecto al racismo que tardó un cierto tiempo en ser identificado. Se creyó durante un tiempo que los racistas tienden a mentir en las encuestas, pero más tarde se vio que no es así, y que lo que ocurre es que en mucha mayor medida no participan en las mismas, con lo que producen un sesgo en un sentido que lleva a concluir que el racismo no pesa en la decisión.

He aquí, extraído de un foro USA, una respuesta elocuente de alguien que al menos ha tenido el detalle de no mentir acerca de sus opiniones:

A la pregunta

Who will you vote for: McCain or Obama?
I'm ready for change.
Obama all the way.

alguien responde:

I don't know if it is the majority of Americans, and I know things are different in liberal states like New York, but it seems everyone I speak to has the same underlying beliefs but is scared to say it out loud.

It is just wrong for a black man to be anywhere other than beneath the white man. And if my experience is anything to go by there are MILLIONS of Americans who think the same as me.

I don't want a black running my country any more than I want my dog running my household.

Es decir:

No sé si forman la mayor parte de los americanos, y sé que las cosas son distintas en los estados liberales como Nueva York, pero parece que todos con los que hablo tienen las mismas creencias subyacentes pero temen expresarlas en voz alta.

Es difícil para un negro ocupar una posición que no esté situada bajo la del hombre blanco. Y si mi experiencia cuenta hay MILLONES de americanos que piensan lo mismo que yo.

No deseo que un negro dirija mi país, como no quiero que mi perro dirija mi hogar (familia).

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Es curioso que no siendo Obama propiamente de raza negra, pues es mulato, en todas partes se diga o escriba acerca del acceso de un negro a la presidencia de Estados Unidos. Los republicanos en campaña se han cuidado bien de hacer correr la especie de que es islamista, sabiendo que para muchos estadounidenses islamista es sinónimo de terrorista. Utilizan la difusión de una mentira, confiando en tener tanto éxito como las campañas de mentiras utilizadas por la administración Bush para justificar las invasiones de Afganistán e Irak.

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B) Barak Obama no es un genocida. Se ha manifestado partidario del diálogo en caso de conflictos, en lugar de iniciar una guerra de exterminio. Pero eso no lo entienden muy bien algunos, y puede que sean muchos, estadounidenses. La paranoia que logró instalar la administración de Bush en la población ha conseguido calar hondo, y mucha gente cree que realmente existe una amenaza para los EEUU por parte de toda una serie de paises catalogados en la llamada "Lista del mal". Se da incluso el caso de que soldados que han regresado vivos de Irak, y que allí han matado impunemente a su antojo, se sienten ofendidos por declaraciones de Obama para considerar la retirada de ese territorio. Mc Cain, sin embargo, se presenta como un aguerrido héroe que superó torturas (cosa discutible, según un periodista cubano que lo entrevistó en sus días de prisionero en Vietnam).

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C) Obama habla de atenciones sociales. Para muchos americanos, instalados desde siempre en la cultura del individualismo a ultranza, eso es una amenaza de convertir en país socialista, léase comunista, a los Estados Unidos. En ese país se hallan en la pobreza unos 30 millones de personas, el doce por ciento de la población. El problema para Obama es que de esa población acude a votar un porcentaje mínimo, entre otras razones porque no tiene acceso a las informaciones de las campañas electorales.

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D) Por último, no hay que olvidar que las elecciones son susceptibles fácilmente de fraude. Así ocurrió en Florida en la primera elección de George Bush. Hay muy diversos procedimientos de voto y las autoridades pueden también descartar a cierto perfil de población (en Florida se hizo con muchos negros pobres).

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¿Ganará McCain, entonces?

No lo creemos, y esperemos que no sea así, luego de que hayamos comprobado lo descerebrada que es la persona propuesta para la vicepresidencia. Me eché a temblar el día en que, luego del conflicto de Rusia con Georgia, y acabada de incorporarse a la campaña por la vicepresidencia, una de las primeras declaraciones de Sarah Palin fue que había que declarar la guerra a Rusia. Naturalmente, no la perderían los Estados Unidos. Con el arsenal atómico que poseen ambas potencias es posible destruir a toda la humanidad decenas de veces. Si Rusia se viera perdida, con sólo hacer explosionar sus silos se terminaba toda la vida humana sobre la Tierra. Quedarían las bacterias y las cucarachas para contarlo, eso sí.

Esa fue una de las primeras declaraciones de intención de la señora que parecía otra cosa, siempre con un niño a cuestas. Luego ya vino toda una sarta de necedades. Los norteamericanos inteligentes ---y recemos para que su número sea significativo--- se han dado cuenta de que no es precisamente una persona experta en política internacional ni en economía. Por otra parte ya ha sido declarada culpable de abuso de poder, al destituir a un jefe de policía que se negó a despedir al ex-cuñado de la señora, al entender que no había ninguna razón que no fuera la de haber caído en desgracia a los ojos de la señora Palin por mor de ese ex.

Otra de las razones en contra de McCain es la situación de la economía. El liberalismo económico a ultranza defendido por Bush y por el hombre al que ha mantenido en la dirección de la Reserva Federal, Alan Greenspan, ha demostrado ser nefasto, porque la codicia sin límites necesita ser controlada. Los norteamericanos han identificado a Bush con esa política económica, y McCain no puede librarse del contagio de la marca del partido que tan nefasto ha resultado. La famosa frase "The economy, stupid" que tanto utilizó Clinton en su campaña contra Bush padre (1992) resuena de nuevo. "Es la economía, estúpido" importa mucho más a los americanos que las relaciones internacionales. El miedo a otro ataque terrorista en casa ha cedido ya con el paso del tiempo, y no hay que olvidar que EEUU tiene las dimensiones de un continente, de forma que sus ciudadanos y sus medios de comunicación acostumbran a ignorar el resto del mundo. Pero no la marcha de su propia economía.

Así que esa es la esperanza, la de que no vayamos a peor. Un McCain sería la continuidad de la política de Bush, algo atemperada, eso sí, porque tanta estulticia y maldad no es concebible. Y el riesgo de que ocupe la presidencia ---McCain tiene sus años--- la señora Palin no es despreciable (el riesgo, no la señora Palin, que también).

Para los que no somos ciudadanos de Estados Unidos, pero que debiéramos votar dadas las consecuencias que tienen para todos nosotros las iniciativas guerreras y económicas de ese país, el que gane Obama no significará sin embargo gran cosa. Si acaso, es posible que consiga mejorar algo la deteriorada imagen moral a la que Bush ha llevado al país, que ha legalizado la tortura y que mantiene la monstruosidad de Guantánamo para que conste que a criminales a ellos no les gana nadie. Pero no le va a resultar fácil la retirada de Irak, si bien es cierto que con un gobierno títere allí el robo del petróleo iraquí está garantizado. Y en cuanto a política social, los poderes fácticos de los Estados Unidos se encargarán de ponérselo difícil. Caído el muro de Berlín y una vez comprobado que el comunismo soviético no implicaba prosperidad, el capitalismo ha realizado una involución histórica y se ha situado en la explotación a ultranza propia del siglo XIX. Y aunque se haya demostrado que un capitalismo desbocado conduce a crisis económicas muy graves, nadie va a enmendar las cosas, puesto que las consecuencias las pagan solamente los más inocentes.

Así que para los no estadounidenses el que gane McCain puede ser motivo de preocupación, no tanto por él mismo como por la bomba de ignorancia con efecto retardado que ha tenido la ocurrencia de invitar a su vera.

Pero si ganara Obama, ¿saldríamos ganando algo? YES, WE CAN'T.